Jorge Icaza
Nació en Quito el 10 de junio de 1906 y allí morirá el 26 de mayo de 1978. Quedó huérfano de padre a los dos años y se educó en la hacienda de su tío en Chimborazo, donde palpó las vejaciones de todo orden que padecía el indio, y que serán, en sus múltiples caras y ámbitos, el constante leit motiv de sus relatos. Regresó a la capital para cursar Medicina, que abandonó para matricularse en el Conservatorio Nacional, de donde salió como actor y director teatral. Así, en 1933, estrenó El dictador, obra que le acarreó la hostilidad de las autoridades ecuatorianas. Al año siguiente publicaba Huasipungo, que le granjeó la popularidad en su país y el reconocimiento internacional y que está considerada el paradigma de la novela indigenista. En 1935 editará En las calles, novela por la que le concedieron el Premio Nacional de Literatura. En tanto, abrió una librería y en 1944 fue uno de los fundadores de la Casa de la Cultura Ecuatoriana e incluso agregado cultural en la Argentina hasta 1953. Al final de su vida desempeñó el puesto de embajador en la Unión Soviética, Polonia y la República Democrática Alemana. Al margen de sus piezas teatrales, serán sus novelas las que le encumbrarán como el escritor ecuatoriano más reconocido, cuya nómina, con los títulos arriba mencionados, la componen Cholos (1937), Media vida deslumbrados (1942), Huairapamuscas (1947), En la casa chola (1959) y la de más notable factura y complejidad, El chulla Romero y Flores (1958). Además de estas novelas, editó seis colecciones de cuentos. |